PREFACIO.
Isla Dawson ocupa un lugar poco digno en la historia y en la geografía de Chile y de la Patagonia.
En la geografía, esta isla austral de 129.000 hectáreas, ubicada entre el continente y la Isla de Tierra del Fuego en el estrecho de Magallanes, es una vasta extensión de pampas y bosques australes gobernada por los vientos fríos del suroeste, las lluvias del otoño y las intensas nevadas del invierno patagónico.
Pero además y sobre todo, Isla Dawson tiene un lugar en la Historia de la Infamia, en la historia de la negación del ser humano y en la historia del abuso.
Antes de Isla Dawson, antes de la llegada de los chilenos y los europeos colonizadores con su "civilización" de cruces y fusiles, solo existía la naturaleza virgen y prístina, estaban los inmensos bosques de cipreses orgullosos, de coigues magallánicos perennes, de lengas soberbias, de ñirres olorosos, junto al arbusto del notro y del calafate espinoso.
Las costas de isla Dawson fueron visitadas desde tiempos inmemoriales por canoeros kaweskar, cuyos conchales revelan la abundancia de mariscos que enriquece sus costas y la presencia humana de los nómades del mar.
En 1881 y en 1889, por encargo de los gobiernos de la época, aborígenes kaweskar fueron secuestrados de los canales australes y enviados a Europa para exhibirlos en ferias y exposiciones industriales.
Este ensayo tiene por objeto presentar algunos antecedentes históricos acerca de la ocupación y del uso de la isla Dawson durante el siglo XX, a la luz de fuentes documentales y bibliográficas disponibles.
Manuel Luis Rodríguez U.
Punta Arenas - Magallanes, otoño de 2013.
EL ULTIMO CEMENTERIO DE LOS SELKNAM DE LA TIERRA DEL FUEGO.
A fines del siglo XIX, la llegada de los buscadores de oro a la Tierra del Fuego y la ocupación de las tierras fueguinas para uso de las grandes explotaciones ganaderas, produjeron el desarraigo violento y el despojo de varios miles de aborígenes selknam.
La "cacería al indio" promovida y financiada por los estancieros (estancias de José Menendez, bajo la Sociedad Explotadora de Tierra del Fuego) y diversos mercenarios fue espantosa: los capataces de estancias pagaban a los mercenarios cazadores 1 libra esterlina por oreja, por nariz o por el cadáver de un selknam. Capataces y peones ingleses, escoceses, irlandeses e italianos, fueron
los "cazadores de indios" que como Mac Lennan o "Chancho Colorado",
pusieron el precio de una libra por testículos y senos y media libra por
cada oreja de niño selknam.
La ilustración corresponde a una cacería de selknam en Tierra del Fuego, el cadáver de un aborígen yace a los pies de uno de los mercenarios cazadores pagados por los estancieros: Julius Popper.
El gobierno de entonces del Presidente José Manuel Balmaceda, en acuerdo con la Congregación Salesiana (dirigida entonces por el sacerdote italiano José Fagnano), decidieron sacar de las pampas fueguinas a los selknam sobrevivientes, especialmente mujeres y niños, para instalarlos en una reserva fuera de Tierra del Fuego. La idea original era salvarlos de la masacre de los cazadores blancos.
El 4 de febrero de 1888 fue creada la colonia salesiana de San Rafael en Isla Dawson. El centro de la misión fue establecido en bahía Harris, en la costa este de Isla Dawson frente a Tierra del Fuego en el estrecho de Magallanes. Entre 1888 y 1970 Puerto Harris, en bahía Harris fue el único asentamiento humano en isla Dawson.
Por decreto N° 2180 del 11 de junio de 1890, también del Presidente Balmaceda, la isla fue entregada en concesión por 20 años a la Congregación Salesiana para una misión de proteger y educar a los aborígenes selknam extraídos de la Tierra del Fuego.
Hacia 1895, la misión contraba con 215 indígenas selknam (o fueguinos).
En 1898 escribía el Gobernador del Territorio de Magallanes Mariano Guerrero Bascuñán en su Memoria al Ministro de Colonización: "El dia de mi visita a Dawson fui penosamente sorprendido por la enorme mortalidad de los párvulos i de los frecuentes estragos que hace en ellos la tuberculosis pulmonar. En una población tan reducida como la que forma la Misión de Bahía Harris, es raro el mes que no mueren cuatro o cinco. Tuve también ocasión de ver algunos adultos, entre ellos el indijena Mario -muchacho vigoroso de de 20 años de edad más o menos- i que yo había conocido pocos meses antes en Punta Arenas, completamente aniquilado por una tisis violenta." (Diario El Magallanes, Punta Arenas, 17 febrero 1898, pag. 2)
Pero, 20 años después, la historia fue más grave que cualquier imaginación.
Años más tarde, la justicia intentó hacerse parte del conflicto y de las informaciones sobre el genocidio selknam por medio de un proceso seguido por el Juez Waldo Seguel.
Este proceso dejó en evidencia que las cacerías perpetradas por mercenarios en las pampas de Tierra
del Fuego no formaban parte de un mito popular y que las capturas
masivas de indígenas sacados por la fuerza para ser trasladados hacia
Punta Arenas, con el objeto de distribuirlos dentro de la colonia como mano de obra gratuita, fueron
también parte de las acciones que las autoridades civiles en
complicidad con los ganaderos tomaban como solución al tema indígena.
No obstante la evidencia que el Juez Waldo Seguel logró acumular, el proceso judicial solo culpó a algunos operarios de
estancia, quienes quedaron libres prácticamente a los pocos meses del
juicio, mientras que los autores intelectuales, es decir los propietarios, administradores y accionistas de las estancias magallánicas como el ruso judío Mauricio Braun, el español José Menendez, o el alemán Rodolfo Stubenrauch, entre otros, además de la responsabilidad del gobernador Manuel Señoret y varios de sus funcionarios subalternos, quienes tenían la obligación de velar por el cumplimiento de la ley, nunca fueron debidamente procesados.
El Censo del año 1907 indicaba, por ejemplo, que en Isla Dawson permanecían como "población rural", 40 hombres y 32 mujeres, o sea un total de 72 personas, a las que debemos descontar los 10 integrantes salesianos de la colonia. (Censo de la República de Chile...1907. Santiago de Chile, 1908, pag. 1250).
El 23 de septiembre de 1911, se embarcaron de vuelta a Punta Arenas los últimos 25 selknam sobrevivientes de la colonia, los que fueron enviados nuevamente a otra misión salesiana, "La Candelaria" en la Patagonia argentina.
Los restantes selknam de Isla Dawson habian muerto gradualmente y en particular entre 1905 y 1906 por una epidemia de viruela y también porque "...el uso de vestidos, el cambio de alimentación, de comidas preparadas i calientes, el dormir bajo techo i con cierto abrigo pardece que lejos de serles beneficioso, les ha sido fatal..." como relata la
Revista Argentina Austral del 30 de noviembre de 1930, pagina 11.
Al mismo tiempo, los curas salesianos crearon una colonia similar en Rio Grande, en la Tierra del Fuego argentina.
Los niños, hombres y mujeres sobrevivientes de la cacería fueguina, vivieron sus ultimos años en la colonia salesiana de San Rafael, donde fueron muriendo lentamente de nostalgia o por las enfermedades transmitidas por los blancos "civilizados": un resfrío o una gripe podían ser desvastadores para estos pueblos originarios. Esos selknam fueron "civilizados" por los curas salesianos, porque aprendieron a cantar y a rezar en latín y a tejer pequeñas prendas de lana.
En la colonia de San Rafael, junto a Puerto Harris, se construyó un pequeño muelle de carga, un aserradero para las faenas madereras, y una capilla católica y funcionó una estancia ganadera, talleres y otras instalaciones de pequeña industria, donde los aborígenes selknam eran utilizados como mano de obra.
Escribe el misionero Martín Gusinde en su libro: "Los indios de la Tierra del Fuego", publicado en 1931 en alemán:
"Debo
revelar ahora la imagen repugnante de la matanza sistemática de
esta magnífica tribu de indios llevada a cabo por blancos codiciosos.
¡En verdad, no es un deber agradable! Tengo el coraje para presentar
los hechos manteniéndome fiel a la verdad. Todos preguntan, asombrados,
por las causas que han reducido en el lapso de cincuenta años a
este pueblo vital, de aproximadamente 4.000 personas, a apenas cien sobrevivientes.
Como en otras partes del mundo extraeuropeo, también en este rincón
de la tierra el "hombre civilizado", ávido de riquezas, se ha abierto
paso con armas de fuego y veneno por los poblados de los desprevenidos
indígenas, marcando ese paso con torrentes de sangre y dejando las
armas de lado sólo cuando se había apoderado de la totalidad
de las tierras ambicionadas. ¡Los derechos humanos más sagrados
fueron pisoteados con la más brutal violencia! Una fiera jamás
actúa contra sus congéneres con la ferocidad con la que aquellos
blancos se comportaron con nuestros indios. Estas líneas son una
eterna acusación contra aquellos cazadores de hombres que despiadadamente
asesinaron al pueblo selk'nam".
Concluida la misión salesiana en Isla Dawson, la isla fue entregada en concesión por el Estado a una sociedad ganadera privada, la Sociedad Ganadera Gente Grande, para la explotación de ganado ovino, ganado bovino y el aprovechamiento de las maderas de sus ricos y extensos bosques. La "Guía Comercial de Magallanes, 1918" ilustra esta actividad industrial a principios de siglo XX.
Grandes incendios forestales, ocasionados por la explotación indiscriminada y sin control, la afectaron entre 1920 y 1950, algunos de ellos de varias semanas y meses de duración.
Desde 1970 el proceso de Reforma Agraria afectó a la estancia allí instalada y al mismo tiempo iniciado el gobierno del Presidente Allende, la Armada de Chile presentó un proyecto al Gobierno para hacerse cargo de la isla, a fin de destinarla a instalaciones con fines castrenses, dada su ubicación estratégica en el estrecho de Magallanes.
Leemos entonces en el
Mensaje Presidencial del 21 de mayo de 1972, en el capítulo relativo al Ministerio de Defensa Nacional:
"La Armada entregó en el curso del año 1971 a la Comisión
Interministerial su Plan Quinquenal de Desarrollo, el que basicamente
consiste en el mejoramiento de la infraestructura, aspecto habitacional y
expansión de los recursos humanos. Este plan comprende, aparte de
construcciones, reparaciones...el desarrollo de la Estación Naval de
Isla Dawson.
La Corporación de la Reforma Agraria expropió en beneficio de la Armada, la Estancia Gente Grande de Isla Dawson." [Presidencia de la República: Mensaje Presidencial del 21 de Mayo de 1972, del Presidente Salvador Allende al Congreso Pleno, Santiago, 1972, pp. 144-145].
En la ceremonia de entrega oficial de la Isla Dawson a la Armada de Chile efectuada en Punta Arenas participaron autoridades de gobierno regional, entre las cuales el ingeniero agrónomo y Director de la Corporación de la Reforma Agraria, CORA, Américo Fontana.
En Puerto Harris se instaló desde fines de 1971 en adelante, una base naval de la Compañía de Ingenieros de Infantería de Marina (COMPINGIN), dependiente del Cuerpo de Infantería de la Armada de Chile.
Así comenzó la segunda parte de la historia de Isla Dawson.
(Fin de la Primera Parte)
FUENTES Y REFERENCIAS BIBLIOGRÁFICAS Y DOCUMENTALES.
Borrero, J.M.:
La Patagonia Trágica. Buenos Aires, 1928. Edición de 1978. Editorial Continente.
Censo de la República de Chile, levantado el 28 de noviembre de 1907. Santiago Chile. Sociedad Imprenta y Litografía Universo, 1908.
Diario El Magallanes, Punta Arenas. Colecciones completas 1898 a 1890.
Ministerio de Colonización:
Memoria que el Delegado del Supremo Gobierno don Mariano Guerrero Bascuñan, presenta el señor Ministro de Colonización. Santiago, 1897. Imprenta i Librería Ercilla. 2 vols.
PATBRIT. Portal electrónico de la Colonia Británica en Magallanes.
www.patbrit.org
Presidencia de la República:
Mensaje Presidencial del 21 de Mayo de 1972, del Presidente Salvador Allende al Congreso Pleno, Santiago, 1972.
Revista Argentina Austral, Buenos Aires. Colecciones completas 1920-1930.